"LOS BOMBEROS TAMBIÉN TENEMOS MIEDO"

La estación principal de bomberos de Distrito Capital en Venezuela, recibe al día cerca de 25 llamadas. Es la estación que atiende el mayor número de emergencias en  Caracas. Cubre el Municipio Libertador y más parroquias que cualquier otra estación en la ciudad. Los casos que atienden generalmente son: fuga de gas, deslizamientos, árboles caídos, cortos circuitos, ascensores estancados y accidentes de tránsito.

Por: María Carolina Suárez

EL MARICHERO DEL TRABAJO SUCIO

Javier Colmenares es recolector de basura en la Parroquia Mariche del Municipio Sucre. Imapsas, el instituto con el que trabaja, no cuenta con los recursos necesarios para hacer una recolección efectiva, por lo que el servicio presenta muchas fallas y Javier debe tratar con público molesto mientras se expone en zonas de alta violencia.

Por: Mariana Bernárdez y Andreyna Rodríguez

PERIODISMO DE ALTO IMPACTO

Thabatha Molina, periodista de El Nacional, cubre la fuente de sucesos. A pesar de que en algunos momentos ha sufrido amenazas, nunca ha dejado a un lado su pasión por informar. Esta profesional de la comunicación demuestra que el periodismo es solo para cuatriboleados.

Por: Isayen Herrera y Grecia Toukoumidis

"AQUÍ UNO RESPIRA PLOMO"

Su voz es igual a la de Hugo Chávez y acumula 10 años de servicio, pero no como presidente sino como bombero. Alexis González llena tanques de gasolina en la estación Superservicios La Planta , en el sector Las Flores de Puente Hierro, a unas pocas millas del barrio Buenos Aires. Trabaja durante el día de seis a una y media de la tarde y, más de una vez, ha sido víctima del hampa.

Por: Mariangel Álvarez y Erika Velásquez

EN RUTAS SALVAJES

Gustavo Romero, un biólogo determinado a mostrar la cara amigable de los animales con mala reputación, combinó los caminos de los laboratorios de la UCV con el trabajo de guía del Terrario del Parque del Este.

Por: Fernanda Cabrera y Partricia González

UN MÉDICO RESTEADO

William López es jefe de cirugía IV del Hospital Miguel Pérez Carreño. Ha trabajado en este centro de salud durante 24 años en los que ha vivido situaciones de secuestro y tiroteos en las salas de emergencia. Para él, su profesión no es lo suficientemente bien pagada, puesto que su vida está en riesgo y no hay dinero que indemnice una perdida vital.

Por: Fabiana López y Andrea Montilla